sábado, 16 de abril de 2011

Schneider Weizen Doppelbock

En estos momentos me encuentro en Hamburgo, Alemania. La verdad que, en lo que respecta a cervezas, no es tan fácil encontrar buenos productos. Por lo general los bares tiene una carta sumamente acotada de cervezas tiradas con dos o tres industriales y una industrial regional, de botellas prácticamente nada, si es que hay alguna es generalmente una opción sin alcohol. Por suerte mi prima, y guía en la ciudad Hamburgo, me llevó a una tienda de cervezas donde me pude sacar las ganas de comprar varias cervezas Alemanas que siempre veía en internet y deseaba probarlas desde Argentina.

En este caso es una Doppelbock cuya particularidad reside en que es una cerveza Weizen (con trigo y cebada).
La historia de las cervezas Doppelbock es muy interesante pero también muy extensa. Podríamos resumirla en que nace en los monasterios alemanes de la edad media a modo de bebida y comida de los monjes durante la época de cuaresma. Estamos hablando de un estilo que fue evolucionando con el tiempo y que hasta el día de hoy tiene dos puntos esenciales: una alta densidad-cuerpo-alcohol y una fermentación de tipo lager.

Digo que este ejemplar de Schneider es particular porque contiene en su receta al menos un 50% de trigo mientras que en las recetas tradicionales el trigo no era utilizado y actualmente es común que una Doppelbock sea a base de granos Pilsen, Munich y Caramunich.

La cerveza tiene un color rojizo marrón, la espuma es abundante y esponjosa color blanca, la retención es buena. Los aromas en principio no distan demasiado de una buena Dunkel hefe Weizen, o sea a frutal de banana y especiado de clavo de olor que derivan de la levadura, también toman fuerza trazas de alcohol y frutos rojos, detrás el aroma característico del trigo. En boca es llenadora, una textura casi sedosa y una gasificación media, la graduación alcohólica es de 8,2%. En sabor vuelve el trigo y todos los sabores de la levadura, el alcohol otorga un trago tremendamente sabroso y perfectamente equilibrado. El amargor muy bajo. El final es afrutado y picante, calienta la garganta y la deja algo seca.
Me pareció una cerveza excelente. Una opción realmente interesante para el invierno.

Saludos!!

1 comentario:

  1. Viste, que tenía razón de la poca oferta de cervezas que hay. Es que muchas que refleja el BJCP son estacionales.
    Haceme caso andá ára los suepr chinos cerca de las estaciones de trenes.
    y bueno no dejes de ir a los biergarten, auqnue con el frío que quizás haga no sea muy recomendable

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